Y no sé porqué pero he llegado a un momento en mi vida, en el que ahora me encuentro, que ya no tengo cuerpo para aguantar más bobadas. Me resulta algo irritante relacionarme con algunas personas y otras no llaman para nada mi atención. No despiertan mi interés vaya. Me resbalan bastante aquellos que un día estuvieron a mi lado, acompañando y alegrando mis tardes y ahora ya nada, es más, muchos ni siquiera saludan por la calle. A muchos he visto agachar la cabeza o sacar el móvil intentando disimular. Ya ves tú que problema. Bendito problema. No me voy a molestar en mencionar porque no me caben en los dedos de las manos la cantidad de gente que conozco a la que solo le importa quedar bien, aunque realmente sea mentira. Feo gesto donde les haya. No quiero a mi alrededor a nadie así. Pretendo que los míos sean sinceros, casi siempre justos conmigo y a veces algo críticos. Que me corrijan y se cabreen, que me ayuden, que me hagan razonar y con ello pensar las cosas dos veces. En oc...
Y si hablamos de tiempo, yo tengo todo el tiempo del mundo para compartirlo contigo.